“31. No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?
32. Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
33. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
34. Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.”
Mateo 6:31-34
A veces pensamos que es fácil decir “no os afanéis”, sobretodo si no estamos pasando por alguna dificultad o incertidumbre que nos aqueje, como considerándonos ajenos a vivir afanados o preocupados, pero todo cambia abruptamente, cuando las circunstancias adversas comienzan a rodearnos, como la pandemia que vivimos, o lo que vemos en los noticieros, o lo malo que está experimentando algún ser querido.
Jesús, al ver nuestra preocupación por nuestras necesidades básicas, de comida o de vestuario, nos enseña recordándonos que Dios tiene cuidado de nosotros, por lo cual debemos aprender a buscar siempre a Dios y su justicia, teniendo la seguridad que todo lo que necesitamos vendrá por añadidura. Quienes no conocen a Dios viven afanados y preocupados de satisfacer sus necesidades, pero los que hemos conocido a Dios hemos aprendido a depender de Él, y Él nunca nos ha fallado.
En el versículo 34 Jesús enfatiza en decirnos “no os afanéis”, que no nos preocupemos por mañana, pues cada día traerá su propio afán, con esto Jesús muestra su principado de paz, entregando tranquilidad si confiamos y esperamos en Él. Maravilloso Jesús, Príncipe de Paz. Verdaderamente hemos encontrado la paz que nuestras vidas necesitan, sus palabras siguen vigentes: “Mi Paz os dejo mi Paz os doy”. Gracias Jesús.
Pr. Herman Gajardo P.

Comments