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RENUNCIAR A LA IMPIEDAD

Foto del escritor: Pr. Herman Gajardo PasténPr. Herman Gajardo Pastén

“11. Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres,

12. enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,”

Tito 2:11-12


El versículo 11, que leemos hoy, nos sintetiza el maravilloso plan de Dios, el cual no es solo para para con nosotros, sino para todo el que en Él creyere, pues dice textualmente: “Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres”’, Amén..!!, dice que es para “todos” los hombres, pero no se trata de un regalo que podemos guardar y abrir cuando podamos o nosotros queramos, nada de eso, el versículo nos enseña que la maravillosa gracia de Dios se manifestó, se hizo presente, se dió a conocer, y esta gracia de Dios se llama Jesús, que quiere decir salvador, y que vino a vivir entre nosotros para hablarnos acerca del Reino de los cielos, y explicarnos acerca de su salvación.


En el versículo 12, leemos: “enseñándonos que renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente”, o sea que la función de Jesús fue enseñarnos los principios del Reino de los cielos, y no ayudarnos a enfrentar y sobrellevar los principios del mundo, pues en el entorno social imperante en el mundo, predomina el hacer lo que bien nos parezca, ser libres de pensamiento, “open mind”, aceptar todo, aunque no concuerden con lo que la Biblia enseña, así está el mundo, lleno de dioses que anulan nuestra visión espiritual, y vivimos en oscuridad, y nos acostumbramos a ella, pero Jesús nos dice que “renunciemos a la impiedad y a los deseos mundanos”, de ti depende el vivir sobrio, justo, y piadoso, sigue a Cristo.


Pr. Herman Gajardo P.


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